La Patagonia Sur en Argentina ofrece al viajero global algunos de los atractivos naturales más deslumbrantes del planeta. En su naturaleza pura y relajante reside el creciente interés que ha despertado este destino en las últimas décadas, posicionándola como uno de los “sitios que los turistas deben conocer antes de morir”.
En la Patagonia Sur finaliza el continente americano con las provincias de Santa Cruz y, más abajo, Tierra del Fuego, nombrada así por Magallanes cuando vio las fogatas de los nativos Ona. Esta región mundialmente famosa causa admiración por sitios como Ushuaia, El Chaltén y el Calafate, sin olvidar los muchos lagos, montes y bosques que abundan en la zona.
La riqueza natural de la Patagonia Sur es bien conocida, ya que deslumbra al visitante con paisaje nevados, inmensas reservas de agua dulce, bosques de coníferas, colonias de pingüinos, cielos limpios y un sitio único como el Glaciar Perito Moreno.
Conocido como “el fin del mundo”, este recorrido por las dos provincias argentinas es mucho más que un viaje común, es el comienzo de una nueva percepción del mundo y de nuestro lugar en el planeta.
Te presentamos una lista breve de algunos de los principales atractivos de la Patagonia Sur.
Ushuaia (Tierra del Fuego)
La ciudad se encuentra a orillas del Río Grande y a más de 2.300 km de Buenos Aires. Cuenta con una población de 60 mil habitantes, una cantidad que se multiplica por seis con la llegada de turistas de todo el mundo.
Ushuaia es considerada la ciudad más austral del mundo y su nombre significa “bahía profunda”. Es además la única ciudad trasandina de Argentina, ya que hay que cruzar parte de la Cordillera de los Andes para llegar.
Entre los principales atractivos del destino, además de su excepcional ubicación y paisajes naturales, se encuentra la posibilidad de realizar interacciones con pingüinos de Magallanes y Papúa, también se puede realizar trekking hasta la Laguna Esmeralda, realizar un paseo en canoa y disfrutar un tour en catamarán para avistar pingüinos en su hábitat. Si de excursiones por agua se trata, también se puede realizar un paseo por la Isla de Lobos y el Canal Beagle.
A escasos 26 km de Ushuaia se encuentra el Cerro Castor, un sitio espectacular donde se puede esquiar en sus laderas nevadas.
Una visita infaltable cuando se está en la zona es el Parque Tierra del Fuego y su inigualable Bosque Fueguino, que es un deleite para los fotógrafos por sus extraordinarios paisajes naturales.
El Glaciar Martial, en los montes Martial, es también una parada obligatoria que queda a solo 5 km de la ciudad. El glaciar constituye la principal fuente de agua potable de Ushuaia y desde sus miradores se puede obtener una buena panorámica de la ciudad y el Canal Beagle.
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Río Gallegos (Santa Cruz)
El recorrido de 570 km desde Ushuaia a Río Gallegos está lleno de sorpresas naturales y puntos panorámicos como el Mirador Paso Garibaldi, el Lago Escondido, el Mirador Lago Fagnano, el Estrecho de Magallanes, la Laguna Azul (que se ubica dentro de un cráter) y el Parque Nacional Pali Aike.
Para llegar, se debe cruzar la frontera entre Argentina y Chile, para luego retornar al país cruzando en balsa por el Estrecho de Magallanes.
Desde esta ciudad de casi 100 mil habitantes se pueden recorrer 120 km de hermosos paisajes para llegar a la Reserva Cabo Vírgenes, casi al límite con Chile, donde vive una población de más de 300 mil pingüinos de Magallanes en su hábitat natural. El cabo sorprende por su deslumbrante fauna compuesta por gaviotas, garzas, liebres, zorros grises, entre muchos otros más.
El sitio, epicentro de varios naufragios, también fue conocido por la fiebre del oro en el siglo XIX.
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El Chaltén (Santa Cruz)
Conocida como la “capital argentina del trekking”, esta pequeña villa turística se encuentra al pie del Cerro Fitz Roy (o Chaltén) y a orillas del Río de las Vueltas.
El Cerro Chaltén es una montaña de 3.405 metros sobre el nivel del mar, conocido como “montaña sagrada” por los nativos tehuelches, que realizan una peregrinación al sitio. Entre los senderos que lo recorren se encuentran hermosas lagunas de aguas cristalinas que invitan a los menos friolentos.
Entre las caminatas más concurridas se encuentran las de la Laguna de los Tres, la Laguna Torre, el Pliegue Tumbado, el Mirador del Torre, la Laguna Capri y la Cascada el Chorrillo.
Una vez en este destino no se debe dejar de visitar el impactante Mirador de Cóndores.
El monte ostenta el reconocimiento del mundo del alpinismo por la dificultad en su ascenso debido a las gritas verticales, el viento imperante y el hielo, incluso con buen tiempo.
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El Calafate (Santa Cruz)
Es una ciudad única en el sur que ofrece una movida nocturna interesante y es considerado por las revistas especializadas como uno de los sitios que todos los viajeros del mundo deben conocer. Se encuentra a 320 km de Río Gallegos y a 80 km del Glaciar Perito Moreno.
Durante el trayecto de 200 km desde El Chaltén a El Calafate se pueden apreciar las vistas únicas del mirador de Cuesta de Miguez, visitar la Reserva Natural Laguna Nimez y conocer muchos puntos fotográficos de interés para cualquier viajero.
El Calafate es conocido como la puerta de entrada al mundo de los glaciares y su vibra es algo que se impregna en todos los que la visitan.
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Parque Nacional Perito Moreno (Santa Cruz)
A este destino se llega recorriendo 80 km de carretera desde El Calafate y es una de las maravillas naturales más importantes del planeta.
Existen varias formas de disfrutar de esta experiencia única. Se puede caminar por los senderos del parque para apreciar los 5 km de ancho y 60 metros de altura del glaciar desde diversos ángulos; también se puede navegar y acercarse para apreciar el glaciar desde la seguridad de un barco con todas las comodidades. Además, hay tours que permiten al turista caminar sobre la superficie del glaciar con la guía de profesionales calificados.
Quienes tienen la suerte de presenciar el derrumbe de sus paredes atesora este espectáculo natural para toda la vida.
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Además de los paisajes únicos, la gastronomía de la Patagonia Sur es digna de admiración.
El viajero no debe dejar de probar una trucha fresca o el cordero asado acompañado de un buen vino de la región. Los frutos del mar también son una delicia patagónica, ya que abundan almejas, mejillones, mariscos, cangrejos, langostinos y centollas.
Y para el postre, la Patagonia Sur posee una reconocida tradición en chocolatería artesanal. Cuando llegues a algunos de sus pueblitos no podrás evitar notar el delicioso aroma a chocolate que flota en el aire frío para mezclarse con el de plantas aromáticas y la brisa marina.
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